Los dispositivos purificadores de aire son aparatos pensados para limpiar las impurezas que se puedan encontrar suspendidas en el aire, como humo, polvo u otros tipos de partículas o sustancias tóxicas.
Las opiniones de usuarios que sufren alergias suelen ser muy positivas acerca de este tipo de purificadores. Personas con problemas como el asma, la dermatitis atópica, enfermedades cardiovasculares, sensibilidad química, etc., utilizan estos aparatos para poder respirar un aire más puro y limpio.
Si quieres conocer más datos acerca de las distintas versiones de purificadores disponibles en el mercado, te recomendamos darle un vistazo a la web de la marca Connexions.
Uso de los purificadores
Las personas sensibles a alérgenos pueden sufrir alergias o incluso experimentar problemas más graves debido al polvo, el polen, la caspa, esporas, ácaros, humo, compuestos orgánicos volátiles (COV) u otros tipos de residuos que se pueden encontrar suspendidos en el aire.
Los purificadores de aire permiten eliminar la mayoría de estas partículas dañinas. Además, algunos de los modelos más recientes, también permiten eliminar una gran cantidad de bacterias, virus y ciertas partículas de ADN.
La reducción de contaminantes en el aire no solo ayuda a las personas más sensibles, sino que también puede evitar contagios de determinados virus o bacterias y prevenir otras enfermedades, como algunos tipos de cáncer, enfermedades respiratorias, EPOC y otras infecciones pulmonares.
Técnicas utilizadas
Existen varios tipos de técnicas de limpieza que puede usar nuestro purificador de aire. Las principales son:
- Purificación por irradiación: la radiación ultravioleta IGUV permite esterilizar el aire que pasa cerca de las lámparas. Ese aire, normalmente, pasa por un filtro HEPA antes de ser expulsado.
- Purificación mediante filtros: los filtros consiguen depurar las partículas que son más grandes, capturándolas físicamente ya que no consiguen pasar por sus orificios. Los famosos filtros HEPA capturan más del 99.9% de partículas de 0,3 μm o superiores.
- Purificación con iones: mediante la emisión de billones de iones con carga cada segundo, se logra neutralizar las partículas más dañinas cuando dichos iones se adhieren a ellas. La carga de las partículas dañinas más pequeñas atrae a los iones como si fuese una especie de imán, haciendo que el conjunto caiga por exceso de peso a una zona donde es neutralizado.
- Purificación con carbón activado: es un tipo de material poroso que puede atraer sustancias químicas volátiles. Normalmente se utiliza junto con otro tipo de filtros como HEPA, ofreciendo una gran relación calidad-precio.
Mantenimiento y gastos de un purificador de aire
Dependiendo del tipo de filtro, estos deberán ser reemplazados cada cierto tiempo para garantizar el buen funcionamiento del dispositivo. Sin embargo, también existen otros tipos de filtros lavables que se pueden limpiar con agua o con una aspiradora.
Según algunos estudios recientes, los filtros lavables podrían perder efectividad después de su primer lavado. Por eso, muchos expertos consideran que la eficacia de un filtro lavable es inferior a la de un filtro reemplazable.
El consumo eléctrico es otro de los principales gastos de un purificador de aire, ya que suelen estar conectados a la corriente eléctrica de forma continuada. Cuando no sea necesario utilizarlos, es recomendable apagarlos o desenchufarlos de la corriente eléctrica para reducir gastos.